Time Warner, una de la mayores compañías de producción de películas y contenidos televisivos, decide ponerse así en manos del operador de móviles AT&T, una de las principales empresas que controla el acceso a Internet y a los canales de televisión paga. Si bien debe ser aprobada por los entes reguladores de EE. UU., la operación está valorada en USD 108.700 millones si se incluye la deuda que asumirá el comprador.
Así se constituirá en una de las transacciones más ambiciosas en materia de telecomunicaciones, en medio de una rápida transformación de la industria y la evolución de la distribución de contenido audiovisual.
Jeff Bewkes, Consejero Delegado del Conglomerado de Entretenimiento, llevaba tiempo negociando la venta de la compañía y AT&T lo sedujo con la oferta de USD 85.400 millones, más asumir la deuda de USD 24.000 millones, para forjar la operación empresarial más importante del año. La compañía de telecomunicaciones tendrá acceso a cadenas como la CNN, TNT o HBO. También contará con sus propios estudios de producción de películas y series, con Warner Brothers.
La fusión convertirá la segunda mayor compañía de telefonía móvil de EE UU en un conglomerado de medios y entretenimiento que ofrecerá a la vez servicios de conexión a Internet en los hogares y programas de televisión. El camino lo abrió Randall Stephenson hace un año, con la compra del proveedor de televisión de pago vía satélite DirectTV.
“Esta es una combinación perfecta de dos empresas con fortalezas complementarias que pueden aportar un nuevo enfoque a la forma en que la industria de medios trabaja para los clientes, creadores de contenido, distribuidores y anunciantes”, dijo Randall Stephenson, Chairman y CEO de AT&T. “El contenido premium siempre gana. Así ha sido en la pantalla grande, la TV y, ahora, en la pantalla móvil. Tendremos los mejores contenidos premium del mundo con las redes necesarias para entregarlos en cada dispositivo. Uno de los principales problemas para los clientes es pagar el contenido una sola vez y luego no poder tener acceso en cualquier dispositivo, en cualquier lugar. Nuestro objetivo es resolver esta situación. Nuestro objetivo es dar a los clientes una elección inigualable, calidad, valor y experiencias que definirán el futuro de los medios y las comunicaciones”, añadió.
La operación tendrá que ser aprobada por los reguladores. AT&T ya se vio forzada hace unos años a abandonar la compra de su rival T-Mobile USA. Ese bloqueo la obligó a buscar alternativas para poder crecer, integrando otros negocios como la televisión y medios digitales.
Proceso de consolidación
AT&T se está expandiendo agresivamente y busca convertirse en una potencia en la industria de medios. Como ya fue señalado, en 2015 compró al proveedor de televisión satelital DirecTV por USD 48.500 millones, Iusacell por USD 2.500 millones y Nextel por USD 1.875 mdd.
Ahora la combinación creará un gran conglomerado conformado por uno de los dos grandes operadores de telecomunicaciones de Estados Unidos, valorado en USD 230,600 millones, y Time Warner. Así se concreta una de las mayores fusiones dirigir la próxima ola de innovación en la convergencia de la industria de medios y comunicaciones, desde la compra en 2011 de NBCUniversal por Comcast.
En cuanto a la industria, AT&T lidera el mercado norteamericano de TV paga con cerca de 25 millones de abonados, seguido por Comcast y Charter Communications, que acaba de adquirir Time Warner Cable por USD 56.000 millones, antigua filial de Time Warner hasta que se separó en 2009. Cablevisión se fusionó también este año con la europea Altice, mientras que Viacom está en conversaciones con CBS para integrar sus respectivas plataformas.
Todas estas maniobras entrecruzadas entre operadores de telecomunicaciones y distribuidores de contenido buscan prevenir que los abonados se descuelguen de sus servicios por alternativas más baratas que encuentran en la red como Netflix o Amazon. AT&T, como Comcast y Verizon, será así propietaria del contenido que podrá emitir tanto por la conexión del cable o en los teléfonos móviles.
© Newsline Report 2016