Durante un nuevo programa de la capacitación virtual organizada por Tv y Video, Pedro Manuel Carmona, CTO de TV Azteca, Carlos Duque, Director Técnico de Telemedellín y Eduardo Bayo, Gerente de Tecnología, operaciones y sistemas de Artear, debatieron acerca de los cambios, desafíos e implementaciones tecnológicas en las emisoras a partir de la irrupción global de la pandemia.
“Enfrentamos un cambio de estrategia técnica, las áreas de producción y programación de nuestro canal principal CANAL UNO, estaban abocados a una programación en vivo ofreciéndole al público diferentes formatos, pero en vivo, como noticieros, etc. En primer lugar, se consideró si la pandemia iba a afectar la televisión en vivo, porque se requerían hacer cambios en los procesos de producción. Se decidió continuar con la estrategia. Desde el punto de vista técnico, nos obligó a hacer cambios para mantener la propuesta en vivo al aire. Tuvimos un momento de apremio, porque se veía como algo difícil de lograr, teníamos que aislar equipos enteros, acciones para prevenir contagios, que complicaban estos procesos. Modificamos nuestros flujos de trabajo, para mantener la propuesta en vivo. Acatamos las normas sanitarias, pero eso no bastaba. Esto no aseguraba que no hubiese contagio, entonces hicimos una estrategia muy agresiva, separando el staff. Mandamos a sus casas a hacer una cuarentena absoluta a parte del equipo. Este tipo de rotación fue costosa, pero logramos mantener al equipo trabajando 18 horas diarias”, explicó Pedro Manuel Carmona, CTO de TV Azteca.
En el caso de Telemedellin tiene cierta similitud al plan aplicado por TV Azteca. “Veníamos desde comienzo de año con una alta producción en vivo, con un alto flujo de personas. Pero en marzo vimos que llegó la pandemia e implementamos planes de bioseguridad. Empezamos a trabajar en la medida que las condiciones se iban dando. Tuvimos un brote en el interior del canal y nos hizo replantear lo que veníamos haciendo, de la forma que veníamos trabajando. Nos ayudó mucho desde ese momento, hemos logrado tener cero contagiados. Aplicamos una estrategia que involucra nuestra infraestructura. En el edificio tenemos una sede muy amplia y la dividimos en dos. Ahora disponemos de dos canales, cada uno con su propio foro de estudio y su personal, zona de alimentación y optimizamos en un 100% la gente que venía. Además, es obligatorio que cualquier persona que ingrese al canal debe llenar una encuesta. Aplicamos muchas campañas de concientización. Esto sensibiliza mucho, logramos que la gente se cuide, y hoy en día estamos haciendo programas en vivo con muy buenos resultados. También implementamos el tema de rotar gente, por turnos. En televisión nos ha tocado aplicar la virtualidad, nos apoyamos en aplicaciones como LiveU, entre otras. Los presentadores los hacían desde casa con luces y cámaras que le proveíamos. Hay canales que están más preparados que otros, pero muchas veces dependemos de internet de la casa del funcionario. En Medellín se ha visto afectado porque mucha gente consume internet para trabajar desde casa. Pero siempre priorizamos la salud de nuestros funcionarios”, explicóCarlos Duque, Director Técnico de Telemedellín.
En este mismo sentido, Eduardo Bayo, Gerente de Tecnología, operaciones y sistemas de Artear, manifestó: “Estamos en situaciones semejantes. En Artear, tenemos 1000 empleados más el talento. La conclusión es que, de los 1000 empleados, 5 o 6 se han contagiado, no dentro de la compañía, sino que externamente. Se detectaron a tiempo y se los aisló. Paralelamente, aplicamos cámaras termográficas para conocer que temperatura tiene el personal, y en caso que la temperatura supere lo que dictamina el protocolo, interviene el médico interno para estudiarlos en detalle. También tenemos sistemas de cámaras que permite rastrear con quien tuvieron contacto. Ya que 15 minutos con un infectado y una distancia menor a 2 metros, implica riesgo de contagio. Parte de la política fue analizar quienes podían trabajar desde el hogar. La mayoría fueron enviados a trabajar home office, el área de sistemas no ha pisado la compañía. Debimos desarrollar un mecanismo más sofisticado de supervisión para que los tiempos de entrega no se demoren”.
“A diferencia de TV Azteca tenemos un canal de 24 horas, con muchos contenidos en vivo, contenidos en vivo para canal de aire, teníamos novelas. La productora de novelas cerró porque en Argentina no hay protocolo para continuar con la filmación. Debimos reemplazarlo por más programas en vivo. Dividimos el staff para que la gente que trabaje desde la casa se alterne semana por medio y poder mandar parte del staff a descansar. Aplicamos también la utilización de barbijos, sanitización, control de estudios. Pusimos acrílicos, para que el área quede circunscripta a ese recinto. Es una política que nos permite cuidarlos y mantener la compañía viva. Por otro lado, no todo el talento está en vivo y en el canal. Llevamos equipamientos para sus cosas, aplicamos sistemas de channel bonding, vimos la calidad ligeramente disminuida. Otro de los problemas típicos es que la persona está protegiéndose, y se tiene que atender a sí mismo para no enviar staff a su casa. Además, que los anunciantes no anuncian como antes, y los administrativos buscan ahorrar costos”, añadió Bayo.
Previo a la irrupción de la pandemia, los flujos de trabajo de colaboración remota ya eran foco del debate, por lo que las emisoras ya se planteaban cambios tecnológicos para enfrentar este tipo de retos. “Cuando detectamos que había problemas en el mundo, decidimos hacer pruebas y ver que nos estaba faltando. No tuvimos ningún tipo de limitación frente a la utilización de los sistemas, administrativos o de sistemas de edición. Hemos armado una estructura que permite seguir funcionando como antes, menos las novelas. Todo esto permitió que sigamos adelante con la merma de calidad, no tan broadcasting como debía serlo”, explicó Bayo con respecto aArtear.
“En nuestro caso en Telemedellin, tuvimos algunas dificultades, llevando los equipamientos a la casa. En el tema de televisión, algunos estaban más preparados que otros, muchas de las cosas se van resolviendo durante la marcha teniendo en cuenta que la pandemia se va extendiendo. Tenemos aplicaciones como LiveU y plataformas como Zoom para el tema de los invitados, a todas les hemos ido probando, educando, capacitando y aún dependemos del internet de la persona. Este es uno de los temas más difíciles de prever, poco a poco nos hemos ido ajustando. Yo creo que seguimos sobre la marcha, este año y no sabemos cuánto del próximo año, seguiremos con estos protocolos”, añadió Carlos Duque.
En este mismo sentido, Carmona añadió: “En TV Azteca tuvimos mucha suerte en ese sentido, porque antes de la pandemia estuvimos trabajando en un proyecto muy ambicioso, automatizado que implica tener muchos procesos basados en la nube. Procesos de postproduccion en la nube, lo cual supone una actividad por internet y muchos procesos virtuales. Como grupo la postura fue tratar de mantener la operación de las empresas lo menos movida de su eje central. México es un país con una economía muy frágil, y asumir una pandemia suponía una catástrofe económica. La postura del grupo Salinas fue apostar que el concepto del virus no equivalía a muerte, sino que con las medidas correctas se podía contener. Teníamos todos los elementos para manejar una operación virtual y mantener los negocios. Fue poco lo que tuvimos que enfrentar de virtualización y remoto, la mayoría de los trabajos se sigue haciendo en los foros, desde la televisora”.
Con respecto a los impactos y desafíos, las emisoras sufrieron serias dificultades económicas que frenaron proyectos de inversión en nuevas tecnologías y sólo se abocaron a la resolución de los conflictos acarreados por la pandemia. “El tema de los anunciantes fue complejo, porque muchos tienen al personal en su casa sin producir. Es lógico que disminuyan mucho, fue un impacto muy significativo. Otro impacto económico fue que cierto tipo de personas deben permanecer aisladas en sus hogares, son cargas económicas que asumen las empresas para mantener los empleos. En Colombia hay cerca de un 20% de desempleo. Con respecto a la calidad de la transmisión, no sigue siendo 100% igual, se ha visto sacrificada. Pero todas las medidas que aplicamos fueron para combinar presencial y virtual, priorizamos la calidad y la salud de las personas. Tenemos muchos programas en vivo de forma presencial, con apoyo de algún talento virtual, pero todos los equipos están de forma presencial para tratar de no impactar tan alta la calidad. Se ha visto afectada, pero trabajamos continuamente para mantenerlo lo más alta posible”, explicó Carlos Duque, Director Técnico de Telemedellín.
En Artear, el objetivo fue mantener de calidad de los productos. “Buscamos mantener esa calidad, poder desarrollar y reemplazar por otro producto los proyectos con los que no pudimos avanzar por la pandemia, por ejemplo, las novelas. El más afectado, ha sido el tema de los noticieros por tener a las personas en sus casas. Tratamos de aportar tecnología y recursos ingeniosos para que el impacto no sea notorio. Todo el mundo sufrió económicamente, Argentina también es un país muy frágil económicamente, hay gente desocupada porque los negocios están cerrados, la cantidad de gente q trabaja por su cuenta es muy alta. Lo que está muy complicado es la cadena de pagos, puede ser que el área comercial lo emite hoy, pero hasta que se recibe el ingreso pasa mucho tiempo, esto hace que debemos cuidarnos en los gastos. Para mantener a la gente con sus salarios, la industria automotriz tiene suspendido gran parte del personal. En el caso de los medios, nuestro personal recibe 100% su salario. En caso de imprenta, le pagan el sueldo en dos cuotas”, manifestó Bayo.
Tv Aztecatambién sintió el impacto económico. “Fue muy fuerte, y será complejo percibir qué porcentaje corresponde a la pandemia, y qué porcentaje a la problemática que veníamos viendo en la industria frente a la competencia con otros medios, México está en una crisis. Estamos viviendo la tormenta perfecta, situación económica difícil como país, parte de la industria también y cambios en la forma del consumo de las personas de la televisión tradicional. Ahora hay sumado el impacto de la pandemia. En nuestro caso, al igual que Artear, estamos viendo una situación que la cobranza se ha complicado. Así como también en los pagos a nuestros proveedores, e implica mucha paciencia por parte de todos. Nos ha obligado a hacer cambios en nuestro flujo de trabajo, tuvimos que reestructurar algunas condiciones ya que percibimos que no iba a durar dos semanas, sino que cambiamos los esquemas de licencia de mantenimientos, pólizas de servicio y soporte. Modificamos la parte CAPEX, para sustituir equipos, cambiar las estrategias. El impacto económico fue muy fuerte, nos permite garantizar los suelos de las personas. Estamos pagando 100% a todos los empleados y tenemos el gasto extra en medidas sanitarias, cámaras, sanitizacion de cabinas, cubrebocas, alfombras, líquidos con los que se limpian cámaras y micrófonos, toda esa operación de limpieza e higiene tiene un costo importante que no se tenía presupuestado”, explicó Carmona.
“Al aire no se ha notado, nuestra parrilla de programación quedó intacta, no ha cambiado nada. Los cambios que vimos fue en noticiero, pero no tuvimos que hacer cambios hacia contenidos. La calidad no ha mermado de manera sensible, todo sigue saliendo de los foros y con las mismas cámaras. El costo ha sido grave, porque aumentaron y disminuyó la cobranza. Este es el peor año de los 27 que estamos con TV Azteca, es el de mayor reto. Una de las labores más importantes que hemos tenido que hacer, es tener un manejo cuidadoso, para poder mantener el business as usual”, añadió Carmona.
Por último, los ejecutivos explicaron que las adquisiciones de tecnología en esta etapa tienen que ver sólo con lo indispensable para salir al aire correctamente. “En Artear, no adquirimos nuevos sistemas, sólo podemos adquirir elementos para salir ante alguna emergencia. Lo que ya habíamos comprado lo estamos instalando. Pero estamos en un proceso de congelamiento, ya que una gran duda es cómo será el día después, cómo quedarán las economías de la compañía”, manifestó Bayo.
En el caso de TV Azteca la situación es similar: “Estamos exclusivamente contando con los equipos que sean indispensables para salir al aire. Afortunadamente nuestro equipo está en buen estado y mantenido. Para hacer nuevas adquisiciones estamos valorando lo indispensable. Se detuvieron los proyectos de nuevas tecnologías, estamos a la espera para saber cómo vamos a regresar. Tenemos un proyecto de encadenamiento de datos, de toda la parte digital de la parte de las páginas de internet. Este proyecto se detuvo por completo porque no es el momento de gastar dinero en innovación. Lo que importaba era contener contagios y mantener al aire la operación. Sabemos que esto genera un daño muy importante a nuestros proveedores. El desarrollo de las nuevas tecnologías es muy costoso, y depende que ellos se lo tengan que vender a las televisoras y al no comprarlos tiene un impacto desconocido. Tenemos que reconocer en qué situación económica quedarán las empresas. No podemos gastar dinero en cambios que estemos seguros que tengan retornos fundamentados”, sostuvo Carmona.
Carlos Duque explicó que, si bien Telemedellín contaba con un presupuesto destinado a innovación, tuvieron que redireccionarlo. “Nosotros teníamos un presupuesto para este año, de un 40 o 50% de inversión. Hemos venido algunas cosas, y otros los estamos empezando en este momento. Hay muchos proyectos que se han redireccionado por la forma en que estamos trabajando. Estamos invirtiendo en soluciones virtuales, equipos para trabajo remoto, software y aplicación para unidades móviles, los recursos son adquiridos de forma juiciosa y precavida, hemos podido invertir algunos dineros que ya teníamos presupuestados”.
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