En un comunicado publicado en el diario Oficial de Brasil, el Gobierno anunció la decisión, tomada por decreto presidencial y justificada por una decisión judicial que exigía apartar de su cargo a De Castro, tras el escándalo la amenaza de cerrar o privatizar Ancine en abril. El funcionario había asumido la presidencia a comienzos del 2018 y su mandato se extendía hasta el 2021. En su lugar se designó a Alex Braga de manera interina.
Bolsonaro destituyó además a Magno Maranhão (superintendente de Registro), Juliano César Vianna (jefe de gabinete del presidente), Marcos Tavolari y Ricardo Pecorari (Secretario de Políticas de Financiamento).
El fallo se debe a la imputación de cinco crímenes presuntamente cometidos por De Castro y funcionarios de la agencia. Los crímenes son prevaricación, calumnia, asociación para delinquir y violación del silencio funcional, entre otros.
Paralelamente, Bolsonaro cuestionó de manera pública al tipo de contenidos financiados por Ancine, a la cual acusó de hacer "activismo". Además, advirtió que organismo deberá someterse a un filtro y a un mayor control cultural.
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