Infinito recibe el 2015 con una programación que no dejará indiferente a nadie: desde los más arriesgados agentes inmobiliarios, pasando por entrenadores desquiciados, familiares bromistas y magia que llenará la vista de los espectadores.
Todo comienza con Restauradores en que, Doug Clark y Mike Baird, dos inversores inmobiliarios especialistas en comprar a ciegas propiedades hipotecadas para luego venderlas a precios inimaginables. El desafío: hacerlo en el menor tiempo posible, limpiar el lugar, renovarlo, decorarlo y conseguir un comprador dispuesto a pagar una buena cantidad de dinero. Es una carrera contra el tiempo y que pone en escena todo lo que se necesita para subsistir en una de las selvas más peligrosas: el mundo de los bienes inmuebles.
Un giro totalmente opuesto puede verse --y lograrse- con Osmin Psycho Triner, el polémico, brutal e intenso plan de ejercicios del entrenador personal más psicótico del mundo: Osmín Hernández. El público podrá sudar sangre y derramar todas las lágrimas que pueda para seguir este show de pérdida de pesos extremo, liderado por un personaje que no cesará hasta conseguir su objetivo, pero que dejará exhaustos y al borde de sus límites a sus ocasionales alumnos, si es que estos logran seguirle el paso.
Por su parte, Todd Howard y su equipo de especialistas en desalojos protagonizan Inquilinos Extremos, con la misión derribar cada día las puertas de los más desagradables, peligrosos e insanos inquilinos que de una u otra forma se han ganado la repulsión de sus arrendadores. Los miembros de este equipo pondrán sus vidas en riesgo para cumplir con el trabajo que sólo tiene un objetivo: echar a los ocupantes problemáticos y recuperar esas viviendas para sus propietarios.
Por otro lado, Tácticas del Terror es una serie que da un nuevo giro a la idea de las cámaras ocultas que gastan bromas inspiradas en la ciencia ficción y en las películas de terror. Con la complicidad de familiares y amigos, las victimas incautas se enfrentarán a casas encantadas, abducciones alienígenas, monstruos, lluvia de meteoritos, entre otros horrores, y demostrarán que el miedo también puede ser divertido.
Para finalizar, la magia tienen su espacio todos con Cosentino, el Gran Ilusionista. Carismático, talentoso y audaz, este hechicero pone en escena una conjunción de juegos mentales, escapismos e ilusionismos en cuatro especiales imperdibles, en donde la realidad tiene una indescifrable frontera con los trucos.
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