28.02.2018 | Mundo | Negocios

MEDIAPRO anunció que abrirá la recepción de ofertas por la retransmisión de la Champions League y Europa League. En consecuencia, la próxima semana y remitirá a los operadores las condiciones de las competiciones que ha adquirido en una cifra cercana a los 1.100 millones de euros. 

 

La productora catalana dará un mes de plazo a los operadores para sondear su interés en un escenario complicado puesto que Telefónica y Vodafone ya avisaron que no emitirán las competiciones si la productora catalana no rebaja los precios por los derechos de retransmisión.

 

Está claro que, en caso de no poder acordar con tales operadores, MEDIAPRO podría buscar asociarse con servicios OTT o bien retransmitirlo con sus propios medios. En este sentido, vale señalar que la tiene en exclusiva los derechos para las próximas tres temporadas (2018/19, 2019/20 y 2020/21), a través de su canal Bein Sports. 

 

Pero la escenario complejo no solo se limita a las competencia internacionales europeas, sino que a la productora de Jaume Roures le preocupa también qué ocurrirá con los derechos por la Liga de Fútbol Profesional (LFP) que se propone incrementar un 30% de los ingresos por las temporadas 2019/2020, 2020/2021 y 2021/2022. El objetivo de la LFP es garantizarse ingresos por 1.300 millones de euros anuales. La modalidad implementada por la LFP de subastar por bloques (partidazo, partido de la jornada, partido en abierto, canal bares, resúmenes, etcétera) ha condicionado el negocio de MEDIAPRO durante 2017. En la anterior subasta, realizada en diciembre de 2015, la LFP adjudicó a Movistar el partidazo de la jornada por 750 millones de euros por tres años, y a MEDIAPRO el resto de los ocho partidos del pago por 1.900 millones.

 

Como MEDIAPRO, tambié la LFP ya anunciado que puede sacar su propio servicio OTT, lo que devaluaría aún más los derechos.

 

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